El 22 y 23 de octubre de 2023, participé en unas jornadas en las que docentes y talleristas de diversas disciplinas artísticas se reunieron para aprender, construir y debatir distintas problemáticas y propuestas. El encuentro se realizó en Montevideo, Uruguay.
En este variado grupo, encontrábamos a expertos/as en cine, música, danza, artes plásticas, drama, teatro, expresión corporal, psicología, artes visuales, psicomotricidad, psicopedagogía, entre otros. Cada uno/a se identificaba de manera única, lo que me resultó intrigante. Interesante fue además observar cómo disciplinas que frecuentemente se asocian con la música eran tratadas de manera individual y, al mismo tiempo, se conectaban de forma integral.
Comienzo
El evento comenzó con una conferencia a cargo de Pablo Casacuberta, que estableció el tono para lo que vendría a continuación. La presentación abordó el tema de la «inutilidad del arte», planteando preguntas y sustentos sobre su utilidad. La exposición fue extensa pero cautivadora y provocó una profunda reflexión. Se exploraron otras temáticas, y la presentación se destacó ampliamente por la forma en que se unieron palabras, colores e imágenes representativas.
Después, se llevaron a cabo varios provocatorios simultáneamente, y cada participante eligió cuál asistir. En mi caso, participé en el provocatorio de arteyeducación.org el primer día. La discusión sobre lo que el arte contemporáneo puede aportar a la educación resultó altamente enriquecedora y reflexiva. Dos artistas y educadoras nos llevaron a reflexionar y nos introdujeron a una técnica para analizar obras centrada en el estudiante, la diversidad y la multiplicidad.
El segundo día, el provocatorio estuvo a cargo de Rossana Tocoli, una actriz que educa (como ella se definió si mal no recuerdo) desde su disciplina, el teatro. Nos planteó una reflexión sobre el rol del tallerista y las pedagogías activas, invitándonos a trascender la noción de lo correcto o incorrecto y a considerarlos como momentos de expansión y contracción. Para comprender mejor su propuesta, aquí está su frase:
«En todo proceso vital existen dos movimientos o estados esenciales: la expansión y la contracción. Movimientos energéticos ligados a la conciencia y al tiempo. El reconocimiento de estos movimientos en la función respiratoria como unidad y síntesis de los procesos vitales, es un punto de partida para desplegar un estado de presencia corporal»
Rossana Tocoli
Talleres y exposiciones
Si creías que eso era todo, debes saber que la propuesta se amplió con dos talleres, nuevamente a elección. Los dos que mencionaré son los que participé personalmente.
El primer taller, sobre música y cuentacuentos, fomentó la creatividad, la acción y la narración, pero desde una perspectiva corporal. El segundo taller, centrado en danza y género, buscó demostrar que no existen distinciones de género en el movimiento, desafiando la noción de que los hombres y las mujeres bailan de manera diferente, promoviendo simplemente el acto de bailar enfocado en el folklore.
Al final del primer día, se presentó una hermosa improvisación que lamentablemente no pude ver en su totalidad. El segundo día, escribimos mensajes de agradecimiento a los organizadores y a los estudiantes de la escuela que gentilmente prestó sus instalaciones para el evento, el Montevideo College.
Por último, quiero mencionar que hubo una ronda de experiencias en la que participé exponiendo Musifica, este proyecto centrado en la didáctica musical que fomenta la revalorización de la música en las escuelas. Las experiencias presentadas por mis compañeros y compañeras fueron asombrosas. Incluyeron desde la combinación de la biología marina y las artes, incorporando a las ballenas en el aula, hasta la inclusión de personas con capacidades diferentes, la unión de abuelos y niños a través de la escritura creativa y mucho más.
Es imposible detallar todo lo que ocurrió en este breve texto, por lo que te invito a participar en un evento similar en el futuro. La diferencia entre escucharlo y vivirlo es abismal.
Observaciones
Recomiendo a «Creatividad Indisciplinada«, por la organización y la elección de expositores. Las instalaciones eran muy lindas, había café, agua y galletitas… Quedaron cortos con opciones sin tacc…
Si tienes problemas corporales, como yo, llevate un almohadón para sentarte. En este caso no se necesitó papel ni lápiz porque ellos te brindaban un hermoso cuaderno con biromes. Y deseo destacar la dulzura en todo momento, amabilidad y respeto que abordó este evento. Fue muy enriquecedor.
PD: la foto de la portada de este artículo fue proporcionada por Lia, una de las organizadoras de este evento.